(Por
sevillanas, 2001)
- Yo te buscaba señora el lunes por
la mañana.
El lunes por la mañana yo te buscaba señora, el lunes por la mañana,
me encontré con tu sonrisa cuando menos lo esperaba.
Cuando menos lo esperaba,
desembocando una calle me dio un vuelco el corazón,
te iluminaba la cara un
leve rayo de sol.
- En un mar de corazones de volantes
y sombreros.
De volantes y sombreros, en un mar de corazones, de volantes y
sombreros,
te acariciaba la brisa de marisma y de romero.
De marisma y de
romero, los almonteños son olas que se acercan y se van,
dejando de nuevo sola
la orilla de mi hermandad.
- Sonaban los campaniles cuando yo
te vi venir.
Cuando yo te vi venir, sonaban los campaniles, cuando yo te vi
venir,
hace un año que esperaba estar tan cerca de ti.
Estar tan cerca de ti, prendíos del simpecao van las risas y el
dolor,
del peregrino cansao que hasta
tu ermita llegó.
- Cuanto duelen los recuerdos cuando
se llega hasta aquí.
Cuando se llega hasta aquí, cuanto duelen los recuerdos,
cuando se llega hasta aquí,
se piden por los que faltan lo que no han podío venir.
Los que no han podío venir, y se renuevan promesas
entonando una oración,
Rocío Blanca paloma que no nos falte tu amor.
- ESTRIBILLO –
Se me antojó que
esperaba,
sonriendo de alegría, sonriendo de alegría,
como se espera a un amigo
sonriendo de alegría.