(Por
sevillanas, 2001)
- Ya no vale lamentarse ni recordar
viejos tiempos.
Siempre te dije que a todo le llegaba su momento.
- Un día me enciendes la noche, otro
me apagas el sol.
De tanto ir a la fuente el cántaro se rompió.
- Que seguro manejabas los hilos de
mi ilusión.
Que tranquilo paseabas los senderos de mi amor.
- No me vengas con tus penas y me
cuentes tu dolor.
Por las sangre de mis venas hoy solo navego yo.
- ESTRIBILLO –
Que no te duele,
no
me cuentes tonterías, que no te duele,
que tu amor fue solo uno de una hoguera
de papeles.