(Sevillanas, 1989)
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Yo he visto soñar a Sevilla, con poetas de Triana, con poetas de Triana.
Con
poetas de Triana, yo he visto soñar a Sevilla con poetas de Triana,
con puentes
enamoraos recitando en la Giralda.
Recitando
en la Giralda, dormida entre azahares la noche engendrando al alba,
yo he visto
soñar a Sevilla y no he visto casi nada.
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Yo he visto soñar a Sevilla, con alamedas de plata, con alamedas de plata.
Con
alamedas de plata, yo he visto soñar a Sevilla con alamedas de plata,
con romances
de locura, besando a la luna blanca.
Besando a la luna blanca dormida entre
poemas la flor embrujando al alma,
yo he visto soñar a Sevilla y no he visto
casi nada.
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Yo he visto soñar a Sevilla, con sus torres enamoradas, con sus torres
enamoradas.
Con sus torres enamoradas, yo he visto soñar a Sevilla con sus
torres enamoradas,
con piropos de alfareros y niñas de porcelana.
con piropos de alfareros y niñas de porcelana.
Y niñas de
porcelana, dormido entre la fragua el yunque y el hierro cantan,
yo he visto
soñar a Sevilla y no he visto casi nada.
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Yo he visto soñar a Sevilla, con cantares y guitarras, con cantares y guitarras.
Con cantares y
guitarras, yo he visto soñar a Sevilla con cantares y guitarras,
con flamencos
y toreros con hilillos de gitana.
Con hilillos de gitana, dormida entre
abanicos la fuente bordando al agua,
yo he visto soñar a Sevilla y no he visto
casi nada.
- ESTRIBILLO –
Y la he visto despertar,
con
rosas de primavera, y lágrimas de azahar,
asomada a su ventana como niña enamorá.