(La
marisma me llama, 2000)
- ¿Quién dice desamparado? si el
cerro a ti te acompaña,
desde que sales a tu barrio hasta llegar a la Campana.
No
tienes camino largo las plegarias se desatan,
hasta un romano en tu paso parece
que a ti te canta.
- Doce águilas de plata, intentan
volar al cielo.
Atadas tienen las patas a los varales del Cerro,
que se le vea
la cara, cuando vayas por el centro.
Dolores mi Virgen guapa que vienes desde
tan lejos.
- Ya no se llama Calvario el cerro
donde tú muere.
Se definió como el barrio te lo pusieron los fieles.
Lo
adornaron con geranios del Cerro "toas"
las mujeres,
de lindos lirios morados, de azucenas y claveles.
- Martes Santo medio día el sol se
para en el cielo,
que quiere ver la salida de la Señora del Cerro.
La luna sale
enseguida te ve venir de regreso
por esa larga avenida, Ramón y Cajal de nuevo.
- ESTRIBILLO -
Pero le sobran razones,
para hacer lo que está haciendo,
no le busques explicaciones,
de rodillas va diciendo,
este es el "hijo del hombre".