(Y cortaron
los alambres, 1985)
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Toda la noche esperando de que la reja saltaran,
para tenerte en mis brazos
lucero de la mañana.
Un almonteño ha gritao
hermano vamos por Ella,
y la fuerza me han fallado al ver su cara morena.
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Ya pisaron la arenas botos de tus costaleros,
yo me ahogo con la pena de que
llevarte no puedo.
Un momento de locura a tu paso me he acercao,
otra vez con la amargura las piernas a mi me han temblao.
- Un almonteño ha salío con todo el cuerpo sudao,
perdona corazón mío que envidioso lo he mirao.
Mirar tu cara no puedo me siento avergonzao,
complejo de rociero los
nervios me han traicionao.
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En la ermita te he esperao Rocío de
mis tormentos,
el gentío me ha empujao
delante de ti me han puesto.
Ya por fin me he decidío me agarro fuerte a un varal,
locura del pueblo mío por fin
te pude llevar.
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ESTRIBILLO –
Yo no podría vivir,
con lo mucho que te quiero,
no puedo, estar
delante de ti,
si en mis hombros no te siento.
