(Baila conmigo, 2003)
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San Gonzalo está en la calle toda Triana lo espera.
Soberano del poder,
soberano del poder,
bajando por san Jacinto para pararse en La Estrella.
Y
llega al puente de Triana,
para cruzar sus orillas, para cruzar las orillas,
dejando atrás su barrio y pasear por Sevilla.
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San Gonzalo está en la calle Triana está disfrutando.
Varales que no se mueven,
bambalinas repicando,
y el palio de la salud, por san Jacinto pasando.
Y
llega al puente Triana,
y el puente se queda chico, el puente se queda chico,
y
en la capilla del Carmen se escucha la voz de pito.
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Al Cristo de San Gonzalo se le ilumina la cara.
Porque espera la visita de la
hermandad de Triana.
De
la hermandad de Triana
y todo el barrio león, y todo el bario león,
esperando al
simpecao pa rezarle con fervor.
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La Virgen de la Salud al señor le comentaba.
Hoy es un día feliz, veremos salir
a Triana.
Quiero
decirte Rocío,
que las dos somos la misma, que las dos somos la misma,
yo estoy
reinando en mi barrio y tu reina en las marismas.
