(Por las arenas, 1983)
- Por las arenas, andando
por las arenas, él va al rocio.
Para sentir su caricia, por los caminos.
Y si se encuentra cansao, Paloma,
y si se encuentra cansao, se agarra a la carreta del simpacao.
- De romeria, en
tiempo de romería, no quiere casa.
Pero la suya está abierta pa tol
que pasa.
Y cuando busca
cobijo, Paloma,
y cuando busca cobijo, la virgen lo acaricia como a su hijo.
- Siempre
abundante, el costo siempre abundante, pa
que le sobre.
Cargado va de esperanza y de ilusiones.
Y allí por donde ha
pasao, Paloma,
y allí por donde ha pasado, se va multiplicando lo que ha sembrao.
- Buen rociero, tu
eres el buen rociero, que nadie ha visto.
El que se pierde en la sombra de los
caminos.
Ese el buen
rociero, Paloma,
ese es el buen rociero, ese que va en silencio por los
senderos.
