lunes, 16 de julio de 2012

El rocío que yo quiero - Diego Reyes

 (El rocío que yo quiero, 1981)


- I -
El rocío que yo quiero y es blanco como la cal,
y sus calles son senderos, hierba y arena a la par
allí viven rocieros y sus casas “pa” jaleo tienen porche y enrama.
Casa “pa” cada hermandad, con corral “pa” las carretas “pa” cuando al rocío van,
con campanario y capilla donde un simpecao brilla las glorias de una hermandad.

Y otras que no tienen “na”
un cielo de estrellas blancas, techo y cobijo le da,
pa” que el sol no la rindiera quiso dios que allí creciera ese verde acebuchal.


- II -
El rocío que yo quiero también tiene un Ajolí,
pa” un arroyo casi seco un puente hicieron allí,
álamo, mimbre y romero, tiene el puente mas salero que los del Guadalquivir.
Y también ese Ajolí, para mayo se engalana y su madera es marfil,
y sus árboles de plata, porque sabe que Triana tiene que entrar por allí.

Y refresca el aire seco,
y las caras sudorosas, de los cansados romeros,
y es que la blanca paloma da en el Ajolí su premio al que al rocío se asoma.


- III -
El rocío que yo quiero tiene marisma y pinar,
un bello sol en el cielo, tiene una noche “estrellá”,
un eucaliptal en sus medios, donde el viento marismeño se hace brisa de la mar.
Nuestro pueblo “pa” rezar, y al llegar la primavera se vienen a su real,
en donde entre seis palmeras está la mujer primera que quiso Dios coronar.

Y la gente que allí va,
caballista y “cantaora”,to” lo que tiene lo da,
y esa raza pura y mora, llora cuando su señora sale el lunes a pasear.


- IV -
Del rocío que yo quiero no se puede decir mas,
el rocío es sentimiento que dentro del alma va,
un cachito de alegría que tiene la tierra mía “pa” demostrar su verdad.
El rocío es eso y mas, son palmas, compás y juerga, alegría y hermandad,
traga el polvo de la arena, bebe el vino, olvida penas como si fuera soñar.

Meterse luego en la ermita,
ver a la gente de rodillas, que llegan hasta el altar,
y entre polvo, humo y vivas, mirar la que esta allí arriba y ante la verja rezar.


Interpretada por Juan Valladares (Andalucía rociera, 2010)