(Nuevo
amanecer, 1993)
-
Despiértate rociero que ya lo hizo la aurora.
Y en el cielo se borraron las
estrellas que en la noche,
las estrellas que en la noche al simpecao velaron.
-
Con un manto plateado por la escarcha mañanera.
Cubierto se hallaba el campo, bajo
las luces primeras, bajo las luces primeras,
del día que va llegando.
-
Todo parece encantado en el nuevo amanecer.
Tras las flores despertaron, el
tamboril con la salve, el tamboril con la salve,
la Virgen ha saludado.
-
Se deslumbraban los ojos al mirar tanta belleza.
El sol doraba los carros, y al
simpecao besaba, y al simpecao besaba,
con el calor de sus rayos.
-
ESTRIBILLO –
Amaneció la mañana,
y del celeste color,
el cielo ya se vistió,
y el
rociero su marcha,
de nuevo otra vez emprendió.