(Mis cuatro rosas, 2014)
- A ti mujer que una nana me cantabas cada noche.
Me cantabas cada noche, a ti mujer que una nana me cantabas cada noche,
señora que desde niño me enseñaste a ser un hombre.
A ti que me regañabas y que me diste lecciones (bis)
de ser honrado en la vida, sencillo, valiente y noble.
- A ti mujer que me diste la cuna de tus entrañas.
La cuna de tus entrañas a ti mujer que me diste la cuna de tus entrañas,
y en tu brazos me dormiste mientras que me amamantabas.
Madre tu que me enseñaste, a no dejar un camino por coger un varea,
a cuidar de mis mayores hasta el final de la senda.
- A ti mujer compañera la que sabe de mis días.
La que sabe de mis días, a ti mujer compañera la que sabe de mis días,
la que me templa en lo bueno y en lo malo es mi alegría.
Sonrisa tras la ventana, abrazo en la despedida (bis)
y el coraje que hace falta pa subir la cuesta arriba.
- Eres mi estrella Rocío la que siempre me acompaña.
La que siempre me acompaña eres mi estrella Rocío,
la que siempre me acompaña y eres mi faro y mi guía y el remanso de mi alma.
Soy el más rico del mundo, yo no necesito nada (bis)
y te estoy agradecido por las flores de mi casa.
- ESTRIBILLO -
Y dentro del pecho mío,
yo llevo mis cuatro rosas,
amores que van conmigo,
abuela, madre y esposa y mi Virgen del Rocío.